"Siempre nos hace falta una historia, aunque parezca que no"
Publicadas por Cyn a la/s 12:04 p.m.
Etiquetas: Por el gusto de escribir
La trapecista encarna el drama del amor y está siempre en manos del aire. La trapecista no comparte el estigma: ser de la tierra y regresar a la tierra. Vivir atados al polvo por la ley de la gravedad y por la pesadumbre del cuerpo. La trapecista actúa siempre con dos pero nunca se queda con ninguno. Se hunde y vuela en la noche en donde no hay red. Su cuerpo se hace vida ante la muerte. La trapecista es el deseo que se va, se halla al alcance de la mano y se escapa. Alta como una estrella en la desnudez, su arte de estar presente se llama ausencia.
José Emilio Pacheco
15 Comments:
tengo tantas objeciones a este texto que, sin más, podría decir: "completamente de acuerdo"
jeje
que stés bien...
es un gusto releerla
no se si alguna vez se lo dije, pero me gusta su narrativa (no soy muy adepto a la cronica, que se q es su fuerte)
¿Y cuantos serán los tipos de botes de basura?
Pensar que alguien pueda tirarnos; arrojarnos a una hoguera sin fuego para quemarnos en el frío. Pensar que de pronto imaginemos todos, todo lo que hemos perdido. Y sabernos en un bote de basura de “ausencias”, aparcados en olvido. Y desde allí tejernos en sueños, donde los tirados somos rostros nuevos.
Cuídate mucho Cyntia
Aún me desvelo de vez en cuando
Ciao
Gerardo…
Cyntiaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
donde andas??
llevas medio siglo perdida!!!
der pseudo: que bueno que le gusto, es todo un reto mantener a los fieles lectores =P
11c: Como le dije a una amiga hace días, todavía no me dejo seducir totalmente por la narrativa, pero ya no me queda mucha resistencia.
Gerardo: Es bueno tenerlo por aquí de nuevo y más bueno que comparta sus propias reflexiones.
Matías: Que milagrooooooo!!! Ya no hay pretextos, me encontraste! =P Espero no perderme de nuevo y que sigamos en contacto =P =D
Gracias a todos por visitarme!
Muchas veces tiramos a nuestro propio agujero del olvido cosas de auténtico valor a las que ya no damos importancia. Quizá, además de objetos, también deberíamos aprender a reciclar nuestros propios sentimientos...
Lo malo es que a veces ese "bote de basura" llega a parecerse tanto al "baúl de los recuerdos" que nos sorprendemos un día -o noche acaso- escarbando y escudriñando en los despojos...
Abrazos y saludos Cyn!!! :)
por eso yo nunca saco la basura!!!!!
querida mariposa de sangre marrón:
Yo tengo un problema de singular dificultad en este asunto. Por más que saco la basura, viene luego mi Koshka, gato simpático pero algo chiflado (ya lo conoce usted), a romper las bolsas en busca, creo yo, de algo de alimento (éste es de los 2 de cada 10 gatos que no prefieren Whiskas).
Total, sólo para decir que a veces lo que para uno son despojos para otros son materia de vital importancia, y que si sabe de algunas bolsas a prueba de felinos cósmicos, me lo hiciera saber por este medio.
con un saludo,
la mascota del gato
ya no te pongo comentarios porque simpre les respondes a los demás y a mí no :(, injusticia...
y les presumo a todos los demás que yo tengo un libro donde sale ese cuentito, y aún más valioso, el autógrafo de la autora :D
cr.
creo haber entendido tu gusto por cortázar...
yaaaaaaaaaa!!! publica otra cosa!!!!
a ver si el elevado número de comentarios se convierte en un aliciente para que pongas otra entrada
a veces parece que no tengo qué hacer...
Gracias a todos por sus comentarios:
Albert: quizá reciclar sería una idea bastante sana.
Román: Uy sí, yo tengo bastante de eso.
Miquel: claro! qué diera uno por juventud, libros, recuerdos... (saludos al gato y a su mascota =P)
Jesé: Aquí esta tu añorada respuesta =P jeje sépase que ese es "mi primer libro".
Der pseudo: A petición suya, ya tengo una nueva entrada =P
Gracias a todos por visitarme =D
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